jueves, 13 de noviembre de 2014

Me enervas.

Siento la necesidad de desgranarte.
De desmontarte poco a poco.
De fijarme en cada palabra que sale de tu boca y, sobre todo, en las que no dejas salir.
Quiero saber si te gusta la lluvia, cuál es tu color favorito, y si tú también te sientes tan perdido,
 a veces. 
Averiguar que, ojalá, te gusten las mismas cosas que a mí, aunque me interesan más las que odias, y las que te alejan totalmente. 
Saber si eres de los que permanece veinte minutos en la cama antes de levantarse o si eres de los que se tiran de cabeza, 
sin pensar. 
Que me digas que la voz de Robe te enamora, y yo finja que no lo sé, 
pero se te nota en la cara. 
Que admitas que eres complicado, como si fuera un gran secreto…
Siento la necesidad de mirarte y aprender, pero, sobre todo,
siento la necesidad de encontrarte.

miércoles, 29 de octubre de 2014

Siempre he sido de masticar las sensaciones, los sentimientos. ¿Sabéis eso que dicen que la comida se ha de masticar como mínimo una decena de veces para aprovechar el sabor? Pues con la vida igual. Se ha de masticar, tanto lo bueno como lo malo. Se ha de masticar hasta que te deje buen sabor de boca.


lunes, 6 de octubre de 2014

Tengo miedo, mucho. Tengo miedo porque ya no consigo que nada me llame la atención. Tengo miedo a no saber hacer las cosas de otra manera y a tener que darlo siempre todo aunque no quiera. Tengo miedo a que ahora quiera construir un muro demasiado alto, a no poder fiarme ni de mi misma y a traicionarme continuamente. Y me aterroriza tener tanto miedo que me haga quedarme paralizada.

miércoles, 24 de septiembre de 2014

Nada que perder

No tener nada que perder es lo peor que te puede pasar. Volver a las andadas, a las maldormidas noches y a los bares de madrugada. Recuerdos borrados a base de etanol. Ir dando tumbos esperando cualquier cosa, y dejarse querer por el primero que se deje engañar.Y todo por un par de gramos de caricias a buen precio. Sucedáneos de una falta que no se quiere admitir.

viernes, 12 de septiembre de 2014


¿Sabes cuándo te desmoronas y tienes que abrazarte a ti misma muy, muy fuerte para no romperte en pedazos? Pues eso mismo...

sábado, 30 de agosto de 2014

Abstracta

Últimamente vivo dentro de un cuadro de Kandinsky.


Monstruos

Una noche alguien me dijo que tenía muchas cosas feas dentro y que las tenía que dejar ir...
¡Pues yo a mis monstruos les pongo nombres y los pinto de colores! :)

viernes, 29 de agosto de 2014

¿Una tirita?

Hay personas que sanan. Yo soy una de ellas.

Es fácil quererme, desprendo ese calor necesario que hace que no quieras huir de él, ese calor que irradia paz y da cobijo. El problema es que hace tiempo que estoy herida, casi sangrando, y yo sola no se me curar. Y no será porque no lo intento. 

jueves, 28 de agosto de 2014

Miau.

Una vez me dijeron que tenía ojos de gata.

«Hola, ulls de gata. T'ho han dit alguna vegada, que tens ulls de gata?»
 me dijo un chico pecoso en un tren... Es curioso que todavía lo recuerde, después de tanto tiempo.

La verdad es que me gustó, y lo tomé como un halago. Pero con el tiempo me dio rabia. Odiaba no tener más de gato, con los ojos no me conformaba. Ni lo sigo haciendo.  
Los gatos son gatos, y eso es lo que envidio de ellos. Se mueven por instintos, y por curiosidad. Cuando un gato quiere hacer algo, lo hace, da igual lo tonto o lo peligroso que sea. Lo hace, y si le sale mal se cae de pie. Porque los gatos hacen lo que quieren hacer, eso hacen...